FRUTAS
ENSALADAS
VERDURAS
AGUA ALCALINA
INFUSIONES
ALIMENTOS A EVITAR
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¿Por qué necesito revitalizar el hígado, el páncreas y los riñones? Es bien sabido que estos órganos son vitales para llevar a cabo nuestras digestiones pero, además, también son piezas esenciales para depurar el organismo y sintetizar hormonas.
Hay épocas en las que uno está más cansado e hinchado, cuando no se hace bien la digestión y en los cuales resulta más laborioso hacer tus tareas habituales. Esto se debe a esos pequeños excesos que cometemos sin darnos cuenta, simplemente por falta de información y de atención. Una mala alimentación, demasiado estrés o beber poca agua, pueden convertirse en factores determinantes para este malestar.
Aquí tienes la información más relevante y consejos prácticos de utilidad inmediata, para que disfrutes de una mejor calidad de vida, aprendiendo a revitalizar el hígado, el páncreas y los riñones.
FRUTAS
Hay que consumir a diario fruta fresca. ¿Cuántas piezas de fruta fresca consumes al día? Un error muy frecuente es pensar que al consumir jugos envasados ya obtenemos nuestra ración diaria de vitaminas y minerales procedentes de la fruta. Pero no es así.
En realidad, el nivel de jugo natural que incluyen estos envases es muy bajo y, además, le añaden azúcar, conservantes, potenciadores de sabor, y toda clase de productos químicos. No podemos decir que sea precisamente una bebida saludable.
Si nos limitamos a beber jugos envasados, nuestro nivel de azúcar subirá mucho y nuestro organismo acumulará todos los productos químicos y conservantes que se suelen añadir a esas bebidas. En consecuencia, obligaremos a nuestro hígado a tener que depurar y trabajar más.
La solución consiste en consumir fruta fresca y, a ser posible, cruda. Nada de mermeladas, ni frutas cocinadas, ni al horno.
LAS MEJORES FRUTAS:
- El limón
- La naranja
- El pomelo
- La nectarina
- La mandarina
- El melón
- La papaya
- La piña
- La fresa
- La ciruela
ENSALADAS:
Para revitalizar el hígado, el páncreas y los riñones, es muy recomendable incluir ensaladas en desayunos y almuerzos.
Podemos añadir un bol con un poco de melón, una ciruela y cinco fresas.
También puedes incluir en tu almuerzo espinacas con piña.
Es muy rico y saludable.
VERDURAS:
Para cuidar nuestra salud general y potenciar el buen funcionamiento del hígado, páncreas y riñones, es imprescindible incluir algunas verduras en nuestra alimentación:
- Alcachofas: Las alcachofas son deliciosas y son una cena ideal, cocinadas con un poco de aceite de oliva y vinagre blanco de manzana.
No olivemos que el agua de la cocción tiene muchas propiedades que fortalecen el hígado y los riñones: añadiendo un poco de jugo de limón, el agua de la cocción es una poderosa medicina. - Zanahoria: la zanahoria cruda rallada está muy rica en ensaladas, con un poquito de jugo de limón.
- Remolacha: Su intenso color carmesí nos indica la gran cantidad de antioxidantes y vitaminas que contienen. Sus propiedades se conservan plenamente al consumirla cruda, en ensalada, o en exquisitos licuados.
- Cebolla: esta hortaliza tiene importantes propiedades medicinales. Actúa como antibiótico, purifica, depura, favorece la digestión y es muy digestiva. Es muy recomendable comer un poco de cebolla cruda a diario, cortada en rodajas, en la ensalada.
AGUA ALCALINA
Empezar el día con un vaso de agua, bicarbonato, jugo de limón, ajo y gengibre.
Este brebaje es un potente alcalinizante natural que favorece la salud general tanto como la del hígado, el páncreas y los riñones. Tomar cada dia un vaso de agua alcalina en ayunas es una sencilla costumbre que favorece grandemente nuestra salud: potencia el funcionamiento de los riñones, ayuda a depurar el organismo, mejora la digestión y combate la acumulación de grasa en el hígado.
¿Cómo hacer agua alcalina en casa?
INFUSIONES:
Hay tres plantas medicinales que favorecen especialmente la función hepática, y fortalecer los riñones: el boldo, el cardo mariano y el diente de león.
ALIMENTOS A EVITAR:
Descartar por completo: el alcohol y el tabaco, la sal refinada, el azúcar blanco refinado y las harinas blancas refinadas.
Conviene Evitar: la comida precocinada o congelada, porque todos los alimentos envasados contienen conservantes, colorantes, aromatizantes, estabilizantes, etc. Los refrescos azucarados y con gas, los dulces y la repostería, las carnes rojas y las comidas grasientas.